Durante el año 2022, hemos visto como el virus de la Influenza Aviar se ha difundido por prácticamente todos los continentes a nivel mundial, declarándose un número muy elevado de focos de la enfermedad.
Las rutas migratorias de las aves salvajes han sido la principal causa de este hecho, dando lugar a que la enfermedad salte entre los diferentes continentes provocando graves estragos en todos ellos. Como podemos ver, los focos de la enfermedad que han ocurrido en España están altamente relacionados con las principales rutas migratorias consideradas de alto riesgo. Por ello, impedir el contacto de las aves salvajes con las domésticas es crucial para el control de la enfermedad.
En este momento se está poniendo el foco en el control de la enfermedad, pues se han estimado solo en este año pérdidas millonarias en el sector avícola, que influyen tanto al productor como al consumidor final.
Durante el último año, se han establecido múltiples estrategias a seguir para el control de la enfermedad, aunque esto no ha conseguido frenar la difusión del patógeno. La realidad, es que aún no se ha conseguido establecer un plan estratégico que elimine completamente el riesgo de la entrada de Influenza Aviar en las explotaciones avícolas.
La vacunación de las aves frente a esta enfermedad de origen vírico está siendo planteada como una posible solución, pero requiere un mayor número de estudios, desarrollos y planes estratégicos antes de que sea una solución definitiva.
En este momento, la única herramienta en nuestras manos para reducir el riesgo de la entrada del virus de influenza aviar de alta patogenicidad en nuestra explotación y proteger a nuestras aves, es mediante estrictos protocolos de bioseguridad. Estos van a prevenir la entrada de este virus que posee una alta tasa morbilidad y letalidad.
Para ello, nos basaremos y apoyaremos en las herramientas de bioseguridad:
- Establecer medidas rigurosas de desinfección de vehículos, herramientas y material introducido en las instalaciones.
- Uso de productos con eficacia testada frente a la Influenza Aviar.
- Uso de ropa de trabajo específica o desechable.
- Desinfección de calzado y manos.
- Plan de movimientos dentro de la explotación (Zona limpia/Zona sucia)
- Mantenimiento específico y riguroso de las instalaciones.
- Control de plagas que actúan como vectores de la enfermedad.
- Reducción de las visitas no imprescindibles.
- Impedir la entrada a personas en contacto con aves silvestres u otros núcleos avícolas.
Las medidas de bioseguridad para la prevención del virus de la Influenza Aviar deben gestionarse de forma integral, para conseguir así eliminar todas las brechas de bioseguridad que existen en nuestra explotación. De esta forma reduciremos el riesgo de entrada del patógeno al mínimo, mediante estas acciones lograremos proteger la salud de las aves y de las personas que están en contacto con ellas.
Desde Bioplagen queremos ayudarte a conseguir eliminar los riesgos de la entrada de patógenos en tu núcleo, fomentando las medidas preventivas y las buenas prácticas en materia de bioseguridad.
La bioseguridad 360º es posible gracias a Bioplagen.
